El Global Retirement Index destaca a México como el país con el mejor sistema de retiro en la región, superando a Chile y Brasil.
Según el Global Retirement Index (GRI) 2025 de Natixis Investment Managers, México se posiciona como líder en sistemas de jubilación en América Latina, destacando en finanzas para el retiro y calidad de vida. En contraste, Chile, Brasil y Colombia enfrentan desafíos significativos en estos aspectos, poniendo en riesgo la seguridad financiera de los jubilados en la región.
En un contexto marcado por la presión demográfica y fiscal sobre los sistemas de pensiones en América Latina en 2025, México ha emergido como el país con el mejor sistema de jubilación en la región, según el Global Retirement Index (GRI) 2025 de Natixis Investment Managers. Este posicionamiento ha sorprendido al superar a Chile, tradicional líder en la región, y situarse en el puesto 35 a nivel mundial.
Los indicadores que destacan a México en el ranking son las finanzas para el retiro, con un notable 64%, y la calidad de vida, con un sólido 56%. Sin embargo, el país aún enfrenta desafíos en aspectos como salud y bienestar material, ambos con un 49%.
En contraste, Chile ha descendido al puesto 37 a nivel global, obteniendo una calificación total del 52%. A pesar de excelentes indicadores en salud (70%) y finanzas para el retiro (69%), su puntaje en bienestar material ha sido apenas del 26%, lo que ha afectado negativamente su evaluación general.
Por otro lado, Brasil se ha ubicado en la posición 40, con un puntaje global del 48%. Destacan en este país aspectos como calidad de vida (62%) y finanzas (59%), pero al igual que otros países de la región, su debilidad más evidente ha sido el bienestar material, con un 27%.
Colombia, en contraposición, se ha posicionado en el penúltimo lugar entre los 44 países analizados, con apenas un 33%. Ha resaltado negativamente en bienestar material, con solo un 7%, y también presenta rezagos en salud y calidad de vida.
La región en su conjunto enfrenta riesgos estructurales y económicos que ponen en riesgo la seguridad financiera de los jubilados. El envejecimiento acelerado de la población y el aumento de la deuda pública ejercen una presión sin precedentes sobre los sistemas públicos de pensiones, agravada por una inflación persistente que ha reducido el poder adquisitivo de los ahorros para el retiro.
Según datos de Natixis, la mayoría de los inversionistas encuestados expresan preocupación por el aumento en el costo de vida, temen una pérdida de valor en sus fondos de inversión y sienten que sus aspiraciones de retiro están en riesgo. Además, existe una creciente percepción de que la responsabilidad de financiar la jubilación recae cada vez más en los ciudadanos, lo que genera incertidumbre sobre la continuidad de los beneficios estatales y plantea un escenario complejo para aquellos que se acercan a la edad de retiro sin un plan claro ni suficiente respaldo.
En este contexto, es fundamental que los gobiernos de la región implementen reformas estructurales que fortalezcan los sistemas de pensiones y garanticen la seguridad financiera de las personas mayores en un escenario de cambio demográfico y económico.
Ante la presión demográfica y fiscal sobre los sistemas de pensiones en América Latina, es crucial que los gobiernos implementen reformas para garantizar la seguridad financiera de los ciudadanos en edad de retiro.
